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Mostrando entradas de marzo, 2009

La oración como transformación personal

Las dos últimas semanas he estado fuera de Honduras dirigiendo los ejercicios espirituales a los misioneros claretianos en Guatemala y San José. He estado tan absorbido que he descuidado mi colaboración en este blog. Los ejercicios espirituales son días intensos de   oración, en su ambiente de retiro de las actividades ordinarias y plenamente dedicados a la escucha de la Palabra, a la revisión   de vida, al discernimiento de la voluntad de Dios en la vida personal y en la tarea encomendada. En artículos anteriores he compartido algunas reflexiones sobre la oración como “acto de fe” y como “expresión de la comunión de vida con Dios”. Motivado por la experiencia de los ejercicios espirituales, quiero prolongar mis comentarios desde una nueva perspectiva que sale al paso de una objeción frecuentemente formulada por algunos, a saber, que la oración es paralela a la vida, no tiene incidencia en ella, no cambia a las personas o que al menos en muchos casos, eso es lo que ocurre. To

Mortificación para la libertad

La cuaresma viene asociada tradicionalmente a la “mortificación”. Pero esta realidad ha sufrido un estrechamiento y reducción de perspectivas. Es preciso ubicarla en su verdadero contexto espiritual para tener una visión más amplia, positiva y liberadora. Vida espiritual es la vida personal animada y guiada por el Espíritu Santo. Él es quien nos hace hijos en el Hijo. Él es quien une a los creyentes con Cristo. Él es quien impulsa a la evangelización, y en lo hondo de la conciencia hace comprender y aceptar la Palabra de salvación. Es el Espíritu quien santifica desde dentro al creyente y quien   se convierte en principio de vida moral, de tal manera   que estamos llamados a vivir según el Espíritu. Pero el creyente no sólo experimenta la fuerza del Espíritu, dador de vida y comunión, sino que también comprueba en sí mismo fuerzas de muerte, de disgregación y de pecado. Tendencias de la “carne” y del “Espíritu” Con San Pablo, podemos decir que el hombre experimenta la